Año 1997. Viaje a Escocia. En aquella época no era tan habitual llevar cámara a todas partes. Solo algunos pringaos cargábamos con la cámara, el trípode y los objetivos.
Por supuesto, era la época de las cámaras analógicas con carrete, cuando hacías la foto y hasta un par de semanas despues no sabías que tal había salido realmente la foto.
Nuestro viaje empezó en Edimburgo durante 3 dias. Luego coche hasta Inverness para ver algo de las tierras altas. En la ruta, vimos indicaciones para un lugar llamado Queen’s View. No habíamos oido nunca hablar de el, pero por el nombre seguramente no estaría mal. Y no estaba mal:
Como decía, la foto está tomada con una Nikon F50. El objetivo seguramente era el que venía de serie (¿un 18mm - 55mm?), y luego utilicé un scanner de negativos de Canon (bastante malillo para los estándares actuales) para digitalizar. No es que ténicamente la foto sea una maravilla, pero tiene algo que me encanta.